Fuente: HuertoUrbano.net
El mes de julio es uno de los meses más fríos del año y, con respecto al calendario de trabajos del huerto urbano, un mes muy tranquilo. De todas formas, siempre es conveniente tener a mano un calendario de trabajos del huerto urbano para no olvidarnos de realizar algunas podas, labores de mantenimiento, plantaciones, un análisis de la programación para los próximos meses, etc.
Es un mes muy indicado para la reflexión sobre todo lo acontecido en nuestro huerto urbano durante los últimos 12 meses. Analizaremos y tomaremos decisiones para ponerlas en práctica en el nuevo ciclo que comenzamos.
Si tenemos plantas aromáticas y culinarias que sobreviven en esta época del año como el tomillo, el romero, la salvia, la lavanda, etc., es un buen momento para podarlas, sanearlas y prepararlas, para que broten con fuerza y bien formadas en cuanto suban un poco las temperaturas.
En el caso de la menta, aunque ya no tenga sus hojas seguirá desarrollando sus rizomas con fuerza por debajo de la tierra. Es un buen momento para limpiar la parte aérea e incluso echarles un poco de tierra por encima.
Verduras y hortalizas en el huerto urbano durante julio
Podemos comenzar con las primeras siembras en invernadero con calefacción para adelantar en lo posible su plantación en primavera.
Si disponemos de un pequeño invernadero, lo debemos ventilar a diario como mínimo de 1 a 3 horas por la mañana para evitar excesos de humedad y que se enrarezca su ambiente.
Provenientes de nuestros semilleros o comprados, podemos ir trasplantando al marco definitivo las plántulas de lechugas de invierno, acelgas, espinacas, coles (de coles de Bruselas, coliflor, brócoli, repollo, etc.), escarolas, etc.
Un aspecto importante a tener en cuenta es que nos encaminamos hacia fechas con mejor clima. Esto quiere decir que las plantas crecerán con más vigor cada mes, por lo que debemos prever a la hora de programar las plantaciones para que no se nos junten.
En el caso de riesgo importante de heladas, no dudemos en proteger los cultivos aportándoles un mulch como la paja o el cañizo, o bien cubrir las plantas con telas antiheladas o mantos térmicos. En el caso de este último recurso, deberíamos levantarlos de vez en cuando para ventilar, como si de un pequeño invernadero se tratase. Los cultivos más sensibles a las heladas son las habas y las alcachofas.
Podemos seguir con la siembra directa de ajos, teniendo en cuenta su verticalidad y manteniendo una profundidad equivalente al doble del tamaño del diente sembrado. Se debe tener cuidado con el exceso de agua para evitar que se pudran.
Si la zona no es muy fría podemos sembrar habas, así como plantar variedades de día corto de cebollino para poder cosechar cebollas a partir del mes de octubre. No nos sirven las variedades de verano.
En esta época del año ya podemos recolectar nuestras espinacas, acelgas, habas, apio, coliflores, etc.
Frutales en el huerto urbano en enero
Es un mes ideal para podar todos los frutales de hoja caduca. En el caso de los tutorados, desataremos sus ramas, podaremos y volveremos a tutorar. Y los que tengan atados durante mucho tiempo, los revisaremos para evitar que estas ataduras estrangulen las ramas que han crecido en grosor.
Si deseamos plantar algún frutal de hoja caduca como el ciruelo, durazno, almendro, parra, peral, manzano, etc. a raíz desnuda, ahora es el momento de hacerlo. Durante su plantación, tengamos en cuenta su espacio final ya que en pocos años podemos encontrarnos con árboles muy juntos y el problema no tendrá solución…
Muchas variedades de cítricos están en su punto de recolección.
Podemos realizar un abonado orgánico o compost. Por una parte aportaremos una importante fuente de fertilizantes y por otra, también protegerá los cultivos mediante su efecto como mulch.